Client: Wool Source Limited

Proyecto: Cradle to Cradle Certified Material Health Certificate™ Gold v4.0 y Análisis del Ciclo de Vida de la gama de productos WS Particles and WS Powder

Contexto: Nueva Zelanda tiene una larga reputación mundial como productor de lana de alta calidad, contando con el mayor número de ovejas per cápita del mundo y siendo la tercera mayor producción de lana después de China y Australia. Las prestaciones naturales de este material incluyen el control de la contaminación, la absorción de olores y aceites, la retención de la humedad, niveles de pH inocuos para la piel y retardantes del fuego.

Wool Source nació con el objetivo de aprovechar las ventajas de rendimiento de la lana en nuevos usos. Utilizan una tecnología innovadora, protegida por patente, para convertir fibra de lana especialmente seleccionada en productos multifuncionales de primera calidad (polvo, pigmentos, partículas y corteza), con aplicaciones para impresión, pintura, revestimientos, packaging, cuidado personal, filtración, bioplásticos y mucho más.

Wool Source deseaba obtener la validación externa y experta de la contribución de sus productos a una economía circular para ofrecer a los clientes una confianza total en sus efectos positivos.

Alcance del proyecto

Acompañamiento a Wool Source en el proceso de análisis e identificación de la salud para las personas y el entorno de todos los componentes de sus materiales y Análisis del Ciclo de Vida del mismo rango de productos.

Paso a paso

EIG ha acompañado a Wool Source en la consecución del estándar Cradle to Cradle Certified Material Health Certificate™. Este certificado, en su versión 4.0, incluye las siguientes partes:

• Primero, conocer la salud del producto: identificación de componentes y sustancias de sus productos WS Particles y WS Powder, de forma que puedan ser compatibles con los más altos niveles del estándar Cradle to Cradle Certified® en cuanto a Salud de Materiales. Para ello, se ha trabajado estrechamente con WoolSource y su cadena de suministro.
• En segundo lugar, entender los protocolos a nivel de empresa para asegurar un correcto control de la producción certificada, para lo que EIG guio a WoolSource en la presentación de los protocolos necesarios y la documentación asociada. EIG llevó a cabo una investigación de las políticas ambientales de la compañía, guiándola en la definición de objetivos a futuro para una mejora continua.
• Por último, pero no menos importante, al tratarse de un producto de base animal, se trabajó en informar de la política de Bienestar Animal de WoolSource y asegurar el cumplimiento de ciertos estándares por parte de los proveedores de la lana. WoolSource se comprometió a suministrarse exclusivamente de lana certificada. Se realizó una investigación de los certificados de bienestar animal de las lanas que se utilizan para fabricar los productos y se verificó que el 100% de los productos están hechos con lana que proviene de granjas certificadas en materia de bienestar animal y sostenibilidad ambiental, según el Programa de Garantía de Granjas de Nueva Zelanda (NZFAP).

Por otro lado, Wool Source quería conocer la huella de carbono de sus productos y comunicarlo con datos a sus clientes. Para ello, desde EIG realizamos el Análisis del Ciclo de Vida, poniendo el foco en 3 categorías de impacto clave: cambio climático, escasez del agua y uso del suelo; e identificando los puntos fuertes y los aspectos del ciclo que pueden conllevar impactos negativos en las personas y en el entorno (desde la extracción de materias primas hasta el final de vida).

1. Se ha analizado el ciclo de vida completo de los productos estudiados, de la cuna a la tumba.
2. El método usado cumple con los requisitos de las normas ISO 14025, EN 15804 y las reglas generales de EPD International.
3. Se han evaluado todos los 38 indicadores descritos en la norma EN15804, tanto obligatorios como opcionales.
4. Se han evaluado los impactos de forma detallada para los 6 procesos de producción.